de Istaravshan
a Shing

Foto"/

Estaba previsto que esto fueran 2 etapas de bici pero dado que no teníamos tiempo suficiente, que había túneles muy peligrosos y que era muy montañosa, decidimos suprimirla y hacerla en coche.
Buscamos una agencia Tayika que ofreciera rutas turísticas por el país y elegimos el Tour de los 7 Lagos, que muchas agencias de viajes organizados lo ofrecen como una extensión desde Samarcanda. Antes de iniciar el viaje negociamos con Bunyod Tours las condiciones del mismo, y una de ellas era que nos recogieran en Istaravshan con nuestras bicicletas.
A las 10 de la mañana, al volver del desayuno nos encontramos que el microbús ya estaba aparcado frente al hotel. Umed era nuestro guía, un joven de 25 años muy dispuesto aunque con poca experiencia.
Subimos nuestras bicicletas y recorrimos los 200 kilómetros que nos separaban de Shing.

Foto"/

La vista de las montañas es impresionante. Las atravesamos y luego avanzamos por un enorme valle, al principio del cual hay un cruce en el que la carretera se divide. Una lleva a la capital, Dushambe, y la otra va hacia Panjakent. Tomamos la de Dushambé por unos pocos kilómetros para hacer una corta parada a comer en un restaurante de carretera. Era tipo buffet y comimos muy bien pero luego dimos la vuelta y tomamos la que iba dirección a Panjakent.
La carretera avanza a todo lo largo del valle, en paralelo a un rio bastante caudaloso al margen del cual hay una sucesión de pueblos.

Foto"/

Casi al final del valle, pasado Gusar, nos desviamos a la izquierda para subir hacia Shing. La carretera se vuelve de tierra y hay un montón de polvo que lo cubre todo. Montón de caminos que suben y bajan cargados de esa tierra blanca, porque parece ser que hay una mina activa en el valle.
Sabíamos que ese camino lo íbamos a tener que hacer luego con nuestras bicicletas en dirección contraria y ya nos imaginábamos cubiertos de ese polvo blanco hasta las cejas.
En Shing Umed buscó un lugar en el que dejar nuestras bicicletas y nos pusimos en marcha. Avanzamos un poco más por el camino de tierra hasta que el microbús no pudo subir más y nos dejó en la carretera con nuestras alforjas. Umed llamó a un taxi para que las subiera hasta la casa de la familia Najmiddin y nosotros seguimos a pie.
Llegamos al primer lago y seguimos caminando hacia arriba. Las montañas están completamente peladas y los lagos se suceden uno tras otro en un ascenso que se hace por la carretera de tierra. Pasan furgonetas con turistas que hacen las excursión en un día desde Samarcanda mientras nosotros vamos caminando sumidos en el polvo que levantan. El paisaje es hermoso pero el camino no. Ir por la carretera de tierra le quita mucho encanto a la caminata.
Umed nos iba explicando el origen de cada lago hasta que empezó a caer la noche y no encontrábamos el alojamiento pese a que preguntábamos a los pocos que encontrábamos por el camino. Nos tuvieron de un lado a otro hasta que al fin llegamos a la casa de la familia Najmiddin. Es una especie de albergue en el que había bastantes grupos de turistas haciendo la noche. Nos alojaron en una habitación cuádruple y compartíamos el baño con el resto.
Nos sirvieron una deliciosa cena en el exterior, una especie de cocido con carne, calabaza, zanahoria, remolacha y papa. Estaba exquisito y super abundante. Después de la fruta nos fuimos a la cama.


>>PASA A LA PÁGINA SIGUIENTE>>

Foto"/
Licencia Creative Commons
Esta obra está bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-SinDerivadas 3.0 España